Conforme pasan los días, las semanas y los meses, el trabajo para llegar a la meta que nos hemos propuesto a veces se dificulta, se hace tedioso y cansado. En ocasiones, seguir con el entrenamiento se puede complicar por razones de trabajo, situaciones, personales o de familia y nos damos cuenta que aún y cuando empezamos muy bien, estamos en una situación que más que avanzar pareciera que damos un paso hacia delante por tres para atrás.

Cuando esto te suceda, no te des por vencido, no caigas en el engaño, no sientas que te ahogas en el remolino de situaciones complicadas, toma un respiro y mirando al frente, sigue adelante. Toparnos con un bache a la mitad del camino nos pasa a todos y la idea es que tu propia fortaleza que has ido adquiriendo sea suficiente para salir de ese bache. Si una vez que saliste del bache y continúas aparece otro obstáculo más grande y complicado de vencer, nuevamente te recomiendo, no darte por vencido, no dejes que el remolino te arrastre, tu sigue adelante.

¡No caigas en el engaño! Es en serio, así lo digo puesto que cuando todo se complica y pareciera que todo a tu alrededor conspira para que tu no sigas adelante con tu proyecto de llegar a tu objetivo, y pareciera que estás en medio de un terrible remolino, nuestra mente puede reaccionar y ser cautelosa y decir…no seguimos…y ¡cae en el engaño, se deja arrastrar al remolino!

¿Qué hacer ante esta situación? Tomar la herramienta más poderosa con la que se puede combatir ese remolino ….el arma se llama ¡Actitud Ganadora!

Aunque todo parezca en contra de tus objetivos, cuando enfrentas los problemas con actitud ganadora, podrás hacerles frente uno a uno y poco a poco ir resolviendo las situaciones complicadas para poder seguir por el camino que te propusiste para alcanzar tus metas.

No te ahogues en medio del remolino, respira profundo y con actitud ganadora, siempre pensando en sobreponerse a los obstáculos por complicados que éstos sean, las dificultades poco a poco pasarán y tu actitud positiva, de éxito, ganadora será tu arma aliada para ir haciéndoles frente una a una.

¡Cuando estás en medio del remolino, actitud ganadora siempre!