Dos historias de vida que comparten una visión y que de varias maneras comparto yo también…

Este fin de semana se llevó a cabo en Los Cabos, Baja California Sur, el evento anual de la Asociación Nacional de Abarroteros Mexicanos, gremio de comerciantes que tiene presencia en todo el país y fue una convención, de las más grandes que he sido invitada. Durante tres días hubo conferencias relacionadas con la economía de nuestro país, la mercadotecnia de las empresas, los productos de mercado que más se venden y tres conferencias de temas de motivación personal, una de ellas, la mía y las otras, de dos mentes brillantes que me inspiraron a seguir adelante trabajando más allá del 100% cada día.

Rosario Marín, nacida en México perteneciente a una familia trabajadora que emigró a Estados Unidos para buscar mejores oportunidades y no obstante los obstáculos que enfrentó en su vida, llegó a ser Tesorera del país más poderoso del mundo, sin embargo, a mi me atrapa por otras razones, la primera su fé en Dios, la segunda su compromiso de trabajar para apoyar a personas con discapacidad y capacidades diferentes y su lucha contra la ignorancia que hace tanto daño aún en un país como Estados Unidos donde pensamos que no hay tal y resulta que hoy, es su enemigo más poderoso… la ignorancia.

Margarita Zavala, más allá de lo que conocía como Abogada de la Libre, Diputada Federal y ex Primera Dama, me atrapa, por su inteligencia que la acompaña sin hacer alardes de ella, simplemente habla de lo que sabe y ha estudiado, me atrapa su manera de ver a este México que hoy padece tantos males pero lo ve como lo veo yo, y eso me gusta, con todas las oportunidades de ser muy diferente y mucho más grande y fuerte de lo que ha sido… cómo??? de una manera sencilla, con el compromiso de cada ciudadano. Invita a todos a ser mancuerna con México, dejando atrás la apatía y el desdén que provocan mucha ignorancia.

Dos mujeres que proponen trabajar para quitar de en medio eso que nos hace mucho daño, la ignorancia.  De ambas exposiciones , yo me quedo con esto, porque no solo la ignorancia ocasiona problemas en un país, en una comunidad, en una familia pero también a nivel personal.  La ignorancia nos hace menos y nos resta posibilidades de tal manera, que desde mi trinchera, me comprometo a seguir trabajando día a día al 100% para tener como fin último, la verdad. Esa verdad que fortalece y nos ayuda a crecer como personas y que nos motiva a seguir adelante y dar pasos para apoyar a otros.

Quiero trabajar de esta manera  para ser feliz…y de así contagiar a otros a hacer lo mismo… como dicen por ahí: “Se tan feliz que cuando otros te miren, sean felices también.” Te invito a hacerlo así tu también…