Mariel Hawley, una apasionada de la vida

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(Por Wendy Plata)
Con gran alegría, de cuando en cuando tenemos la oportunidad de encontrarnos con personajes tan inspiradores como Mariel Hawley, quien nos compartió un poco sobre lo que la motiva a continuar.  Abogada de profesión, nadadora de vocación, filántropa por convicción, mujer de familia de corazón, Mariel es una apasionada de la vida, a la que años de lucha y dedicación le han valido convertirse en monarca, siendo la primer mujer mexicana en conquistar la mar al obtener la Triple Corona de Natación en Aguas Abiertas.
Eres la primera mujer en la historia de nuestro país en conseguir la Triple Corona, lo que sin duda demanda una enorme fortaleza física y mental. Como deportista, ¿qué implicaciones conlleva como mujer una competencia de tal magnitud?
Conseguir la triple Corona de Natación ha sido un proyecto de mi vida desde el 2009 hasta la fecha. Este tipo de eventos deportivos requieren de una preparación física que conlleva mucho esfuerzo y un entrenamiento deportivo que entre otros aspectos requiere de muchos kilómetros de natación. Sin embargo, este esfuerzo en mi caso no podría llevarlo a cabo sin el apoyo de mi equipo principal, mi familia.
El entrenamiento deportivo para los nados que conforman la Triple Corona de Natación es decir, el Maratón de Nado alrededor de la Isla de Manhattan, el Canal de la Mancha y el Canal de Catalina, requiere de muchas horas de preparación física de todos los días en la alberca, pero también de horas de nado continuas durante los fines de semana en lagos, mares o ríos. Sin el apoyo de mi familia, no podría ni siquiera prepararme para un nado así. Su entusiasmo y apoyo son parte de mi preparación.
¿En tu carrera como profesional y como deportista has tenido que enfrentar algún tipo de discriminación de género? ¿Cómo manejarlo?
Los eventos de aguas abiertas en los que he participado han sido históricamente eventos en los que particpan más hombres que mujeres y, en ocasiones, la gente piensa que son eventos no aptos para mujeres. En sí, esta mentalidad sería una limitante y una manera de discriminar la particpación de mujeres, sin embargo, hoy he logrado estos tres nados, pese a lo que se podría suponer; y siendo una mujer no sólo comprometida con mis eventos deportivos sino con mi familia, mi trabajo y la causa, por la que mis nados se traducen en cirugías para niños con labio y paladar hendido a través del proyecto Quiero Sonreír.
¿Qué te motivó a cambiar las controladas aguas de una piscina por el inhóspito nado en aguas abiertas?
Desde niña, siempre me ha fascinado el mar y mis recuerdos más lejanos se remontan a momentos en la playa o nadando en el mar, de tal manera que nunca he tenido miedo de nadar en el mar y esto ha sido un factor importante para participar en eventos de aguas abiertas.
Hasta la fecha, sigo participando en competencias de alberca, me gusta particpar en 200 metros dorso, 200 metros pecho, 400 Combinado Individual y 400 y 800 metros libres, sin embargo, disfruto muchísimo los nados en aguas abiertas en donde el reto es con uno mismo.
¿Cómo te preparas antes de cada reto?
La preparación implica, una base de kilometraje que hago todos los días en alberca, entre 4 y 4.5 kms diarios. Los fines de semana, horas de nado continuo, 4 horas de nado en Las Estacas, Morleos y en la Laguna de Alchichica Puebla, horas de nado que aumentan cada mes hasta llegar a 9 horas continuas. Todos los días baño de agua fría y una vez a la semana una hora de tina con agua fría y hielo.  Para el Canal de la Mancha y el Canal de Catalina, parte de mi preparación física también fue subir 8 kilos de peso para contrarrestar los efectos del agua fría en mi cuerpo…por ahí dicen que no hay focas flacas.  El problema ha sido bajar los kilos extras.
¿Qué representa para ti Gertrude Ederle?
Gertrude Ederle fue la primera mujer que nado el Canal de La Mancha, lo hizo en 1926.  Representa una hazaña espectacular, una mujer valiente, comprometida, que rompió paradigmas de su época y logró hacer lo que los hombres de su época consideraban que ninguna mujer haría nunca, cruzar el Canal de la Mancha nadando.
Si el día de hoy tuviera la oportunidad de invitar a nadar a alguna persona, la invitaría a ella, para mi sería un honor. Falleció en 2003 de 97 años y este año, el próximo 18 de agosto voy a nadar en su honor.
¿Qué te mantuvo a flote tras horas de brazadas en el agua helada del Canal de la Mancha? ¿De dónde obtener ese impulso extra estando en el límite?
Lo que me mantuvo a flote y dando brazadas hasta llegar a la otra orilla en el Canal de la Mancha es una gasolina especial que se llama amor, compromiso y generosidad. El amor y apoyo de mis hijos es mi motor, pero el saber que mis brazadas en el agua transformarían la vida de muchos niños con labio y paladar hendido, a través del proyecto Quiero Sonreír,  fue la gasolina especial que me hizo continuar hasta lograr el cruce.
¿Cuál es tu motivación para el Ederle Swim 2013?
El nado Ederle significa un nado emblemático porque lo haré en honor de esta gran mujer y además espero que mis brazadas transformen la vida de más niños con labio y paladar hendido o niños con problemas auditivos, esto será posible gracias a la generosidad de Grupo Martí, de la Fundación Alfredo Harp Helú AC y de BRIMEX, Clínica de Beneficencia del Centro Médico ABC.
¿Cómo sorteas tu tiempo entre la familia y la extenuante preparación física?
Trato de equilibrar mi vida, pero siempre teniendo como prioridad mi familia. Como lo comenté antes mi familia es mi principal equipo de apoyo. Me levanto muy temprano para ganarle un par de horas a mis días y así entrenar y aprovechar al máximo mí tiempo.
¿Cómo surgió la idea de “nadar con causa”, de combinar una pasión deportiva con una misión altruista?
Nadar con causa surgió en 2007 con el cruce Cuádruple al Canal de la Mancha del equipo Sport City México, del que fui parte y que hicimos en relevo. Todos los integrantes del equipo nos reunimos y decidimos que queríamos hacer este nado a favor de alguna causa, y decidimos que sería en favor de niños con labio y paladar hendido. Como parte del equipo Sport City México, logramos hacer el Cruce Cuádruple al canal de la Mancha y lograr una marca mundial que sigue vigente hasta la fecha.  En 2008 nadamos un cruce doble al Estrecho de Gibraltar y en 2009 un nado en el Río Grijalva. Cuando inicié el proyecto de la Triple Corona de Natación quise continuar con esta causa a través de Quiero Sonreír y así, con mis brazadas seguir beneficiando a estos niños.
¿Qué memorias conservas de tu participación con la Fundación Quiero Sonreír y con la Fundación Mexicana del Corazón?
Tengo muy cerquita a Quiero Sonreír y a los niños que han sido beneficiados con mis nados. Visito la clínica BRIMEX en donde se practican las cirugías al menos 4 o 5 veces al año, y he visto la sonrisa en muchos niños que antes no lo podían hacer. Es una bendición para mí poder ser parte y poner mi granito de arena para lograr este beneficio.
¿Qué descubrimos de Mariel Hawley en el libro Días azules?
Días Azules es una celebración de vida y descubrirán todo lo que me motiva a celebrar cada día y vivirlo a plenitud. Comparto momentos especiales de mi vida como nadadora y cómo el apoyo y cariño de mis seres queridos ha sido fundamental para lograr la Triple Corona de Natación.
¿Puedes hablarnos sobre tu conferencia “Lo que me hace continuar”, en el marco del Día Internacional de la Mujer?
Cuando llevaba nueve horas y media nadando en el Canal de la Mancha, tenía tanto frío, me pesaban los hombros en cada brazada, me dolía la garganta y la lengua la tenía tan hinchada por la sal que casi no me cabía en la boca… estaba al límite de mi capacidad física y pensé que no podría seguir nadando… qué me hizo continuar es justo lo que comparto en mi conferencia del DIM.